El cuerpo humano es un mecanismo sorprendente. Cuanto más aprendemos sobre el funcionamiento de sus órganos y sistemas, más apreciamos la exquisita complejidad de su diseño. Todas las partes trabajan coordinadamente para conseguir cosas que ni las más sofisticadas máquinas pueden emular. Aunque existen muchos, un claro ejemplo del complejo Seguir leyendo